Participé de una jornada sobre el “Acuerdo de Escazú, sus perspectivas y desafíos” organizado por la Secretaría de Ambiente de la Nación con el objetivo de difundir este instrumento regional, visionario en participación pública, acceso a la justicia y a la información ambiental.

Es el primero legalmente vinculante en derechos de acceso de América Latina y el Caribe.

Este tipo de tratados es fundamental porque representa una política de Estado. Uno de los temas que más me moviliza de este acuerdo es lo relacionado al acceso a la información. Si nosotros no estamos informados, no podemos ejercer nuestros derechos como corresponde.

Estamos luchando por un derecho ambiental a una mejor vida, y es un derecho humano indispensable.