Realizamos una jornada destinada a reflexionar sobre la búsqueda de la pobreza cero como desafío y esperanza.

El evento llega luego de la conferencia realizada sobre Adicciones y Narcotráfico,  donde se debatió pacíficamente propuestas para esta lucha que destruye a nuestro país en sus más débiles: pobres y jóvenes.

La Argentina debe unirse y comprometerse para erradicar la seguridad alimentaria. Muchas veces, la pobreza no significa que no se tenga para comer, sino que gracias a la asignación universal por hijo se logra comer, pero se come mal; se vive en condiciones indignas; no hay red de cloacas ni agua potable. Desde ya, todos necesitamos igualdad de oportunidades y se logra con educación y la capacitación en un trabajo.

Los argentinos debemos volver a reflotar un sentido de fraternidad que se mantenga en el tiempo. Las organizaciones que hemos escuchado hoy son organizaciones que han logrado esto: trabajar de una forma estructural y consecuente durante un largo período de tiempo y así se consiguen resultados. Esto hay que hacerlo como una política pública, que trascienda gobiernos de turno.