La semana pasada tuvimos intensas reuniones sobre la problemática del empleo: no debemos caer en la trampa del relato de angustia que se nos quiere imponer desde algunos sectores, pero si debemos encontrar las mejores herramientas para cuidar y crear empleo.
La democracia no implica que no va haber problemas, juntos podemos arreglar el desmadre que nos dejaron. Diputados nos alentamos mutuamente en estas largas jornadas y recibimos una charla de pensamiento positivo para reforzar nuestra vitalidad. ¡Si, se puede! Hay mucho por hacer.
