BUENOS AIRES, jun 03 (DyN) – Diputados nacionales macristas y peronistas disidentes le reclamaron hoy al designado ministro de Defensa, Agustín Rossi, que “se ocupe de los temas en los que sus antecesores fracasaron”, como “la falta de radares en la frontera norte” del país y “el robo de armas de guerra en dependencias militares”.

A través de una carta enviada a Rossi, los opositores alertaron sobre “la falta de control existente en las fronteras del país, especialmente la frontera Norte, donde no se ha instalado la cantidad necesaria de radares 3D para un adecuado resguardo de nuestro espacio aéreo”. También advirtieron sobre la salida ilegal de vuelos “con armas, drogas y cualquier otro tipo de producto contrabandeados”, se consignó en un comunicado.

Se trata de los diputados Julián Obiglio, Paula Bertol, Cornelia Schmidt Liermann, Pablo Tonelli, Gladys González, Silvia Majdalani, Enrique Thomas, Gustavo Ferrari, Eduardo Amadeo, Carlos Brown, Omar De Marchi, Roberto Pradines y Patricia Bullrich, se informó.
Asimismo, pidieron que se revea “la decisión de no implementar un protocolo de intercepción y derribo de aeronaves no identificadas como el que tienen Brasil, Chile y Uruguay”, dado que -a su entender- “de nada servirá radarizar las fronteras si no se actúa para impedir que los vuelos ilegales ingresen y salgan de nuestro territorio con armas, drogas o cualquier otro tipo de producto contrabandeados”.
Según indicaron, “el Plan Escudo Norte lanzado en julio de 2011 solo agregó radares del tipo RASIT, que si bien son útiles para el control de grandes formaciones armadas terrestres, nada aportan al control del espacio aéreo, dejando por ende, grandes espacios libres de monitoreo a través de los cuales diariamente se filtra una escandalosa cantidad de aeronaves no identificadas”.
Además, exigieron que se “mejore el resguardo que se da a las armas portátiles propiedad de las fuerzas armadas” y recordaron que “en la sesión informativa del 4 de julio de 2012, el Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, indicó por escrito que han desaparecido 187 armas de fuego, 2300 rondas de munición y piezas para montar 247 fusiles FAL”.
“Es urgente establecer los controles y protocolos de acción necesarios para que ello no vuelva a ocurrir, ya que las armas que se roban al Estado acaban en los arsenales de peligrosos criminales, narcotraficantes o terroristas”, añadieron.