El despiste de un avión de Austral puso en peligro la vida de 101 pasajeros y volvió a demostrar que el transporte aéreo nacional es un peligro permanente. Crecen el despilfarro y la falta de inversión
La pésima gestión de La Cámpora al frente del Grupo Aerolíneas lleva a la triste situación de que los usuarios antes de adquirir un pasaje tengan que pensarlo dos veces por el temor que genera conocer las condiciones inseguras en las que se producirá el viaje.
Ayer, apenas 8 días después de que un avión de Aerolíneas y otro de Austral chocaran en Aeroparque, otra aeronave de esta última empresa se despistó al aterrizar en el aeropuerto de Ezeiza, poniendo en riesgo a los 101 ocupantes que iban a bordo.
El hecho ocurrió a las 5.45 cuando aterrizó el vuelo 2255, procedente de Río de Janeiro con 96 pasajeros y cinco tripulantes a bordo, quienes debieron descender del avión por los toboganes de emergencia. A causa de este incidente y a que a la segunda pista se le estaban realizando trabajos de mantenimiento, el aeropuerto internacional estuvo tres horas sin operar.
Mediante un comunicado de prensa, Aerolíneas Argentinas (operadora de Austral) informó que la situación se produjo “debido a las malas condiciones climáticas imperantes”.
Es decir, así como hace una semana la empresa conducida por el camporista Mariano Recalde minimizó el choque de dos aviones, ahora deposita las responsabilidades en el clima.
Lejos está el funcionario de reconocer el despilfarro de dinero que anualmente realiza la empresa (ver aparte), y la falta de inversión en seguridad y tecnología.
Descontrol absoluto
A la hora de dimensionar el peligro de transitar los aeropuertos en el país, el diputado nacional Gerardo Milman, explicó a Hoy: El sistema de control aéreo es pésimo, los radares no funcionan, no ha habido inversiones en equipos de tecnologías, y claramente viajar en ese contexto resulta peligroso.
El legislador, que denunció a Mariano Recalde por abuso de poder y ha señalado reiteradas veces los malos manejos del funcionario, se refirió a la situación de la aerolínea de bandera: Para cambiar esta situación lo primero que tiene que pasar es que Aerolíneas se convierta en una empresa profesional, y deje de ser la caja de La Cámpora. Tiene que tener una conducción empresaria de gente que tenga certeza y formación en la industria aeronáutica.
Además hay que controlar a dónde se va el presupuesto, porque cada vez se destinan mayores recursos económicos para financiar el servicio. De hecho, en el presupuesto 2014 crecen otra vez de manera injustificada, destacó.
Una situación legal confusa
El diputado nacional Gerardo Milman, aseguró a Hoy, que las irregularidades que comete La Cámpora al frente de Aerolíneas están amparadas por una situación legal confusa, porque aunque tengan un discurso que habla de la recuperación de la soberanía y de la Aerolínea de bandera, a la hora de rendir cuentas ante los representantes legislativos como debiera hacer toda empresa del Estado, esquivan la situación y se justifican con que son una empresa privada.
Aerolíneas: el inmenso agujero negro del Estado
De acuerdo a un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN), las asistencias acumuladas del Estado Nacional al Grupo Aerolíneas Argentinas (que controla también la flota de Austral) hasta el 30 de junio de 2013 ascienden a $15.454.612.274, cifras más que alarmantes y que vuelven a poner en relieve el despilfarro K en el uso de fondos.
Es que la compañía aérea estatal pasó de la desinversión de empresa española Marsans al desmanejo de la administración kirchnerista de La Cámpora, que recibe millones, que no se traducen en la mejora del servicio.
El propio presidente de la compañía, Mariano Recalde, reconoció días atrás en el Senado nacional que el déficit operativo de la firma este año llegará a los U$S 250 millones, aproximadamente un 12% de su facturación.
Para peor, la desinversión impacta directamente en la calidad de los aviones: la flota actual cuenta con un promedio de edad de 11,7 años, muy superior a otras de la región.
Ratificaron la denuncia contra Mariano Recalde
Esta semana ratificamos la denuncia contra Mariano Recalde, afirmó a este diario el diputado nacional Gerardo Milman, quien junto a los legisladores Patricia Bullrich, Omar De Marchi, Paula Bertol y Cornelia Schmidt-Liermannrealizaron una presentación ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para proceder a ratificar la denuncia efectuada en su momento contra el funcionario.
La denuncia fue realizada el día 2 de septiembre del corriente contra el doctor Recalde por abuso de poder y violación de las leyes nacionales de Defensa de la Competencia en lo que se entiende como un claro embate contra la empresa LAN. Los diputados sostienen que Mariano Recalde, en su calidad de presidente del directorio de Aerolíneas Argentinas SA, ha cometido abuso de poder y ha violado las leyes nacionales de Defensa de la Competencia utilizando sus vínculos con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, montando así una desleal campaña de destrucción contra la empresa LAN Argentina S.A. principal competidora de la compañía comandada por Recalde.