Ya es una buena noticia que un grupo de legisladores de diferentes fuerzas políticas y un grupo de expertos se hayan sentado a debatir sobre el bullying o acoso escolar en las escuelas argentinas. Y lo más alentador es que salimos del espasmo al pensar que el interés por la problemática estalla sólo cuando aparece un caso con repercusión en la opinión pública y en los medios. Y es que alrededor del bullying todo esto pasa y al mismo tiempo. Pero lo importante es que el tema esté vivo para seguir abordándolo, y quitarle definitivamente el manto de silencio, que lo oculta y lo niega.

El tiempo después de la sanción de la ley contra el acoso u hostigamiento escolar, hay dos aspectos que aún la problemática del bullying no encuentra respuesta: la certeza de que la información estadística a nivel país es casi insuficiente y que todavía hay muchas escuelas –entre directivos y docentes– que no se comprometen firmemente frente al tema, no lo dimensionan de manera real, lo minimizan, lo subestiman.

El seminario sobre “Convivencia y conflictividad social en las instituciones educativas – aulas seguras” encaró el tema desde tres aspectos fundamentales: el alcance de la recientemente aprobada ley contra el bullying; la urgencia de la elaboración de una guía de procedimientos para prevenir y erradicar el acoso y, finalmente, la discriminación y currícula escolar.

Es cierto que la ley contra el bullying salió del consenso“, afirmó la diputada PRO Cornelia Schmidt-Liermann, y agregó que “es importante seguir trabajando en este problema que no sólo involucra a los niños sino a toda la sociedad, es por eso que tomamos el compromiso de volver a reunirnos para evaluar cómo ha evolucionado la implementación de la ley y cómo se ha avanzado en el objetivo de luchar contra el acoso“.

 

Convivencia feliz

La diputada nacional por el FPV Mara Brawer, quien presentó el proyecto de ley original contra el acoso escolar, se refirió a la necesidad de crear un espacio donde se pueda abarcar el tema y sostuvo que “si todos hablamos sobre convivencia, los chicos tendrán una mayor contención. Lograr tener un equipo que involucre a jóvenes y adultos es fundamental para la prevención de estos casos porque se ha demostrado que, al intervenir los adultos, disminuye la violencia”.

La legisladora Schmidt-Liermann sintetizó que “tenemos que capacitar a todos los miembros posibles de la comunidad, porque es ahí donde radica el problema“, y remarcó su interés por continuar investigando sobre este tema: “Tenemos que hacer investigaciones sobre el tema del acoso escolar y trabajar con estadísticas para así poder orientar todos los esfuerzos al logro de metas concretas“.

La idea del seminario es formular una especie de recomendaciones a tener en cuenta en la reglamentación de la ley contra el bullying. Entre las conclusiones más relevantes de los legisladores y expertos se destaca: el cuidado por no revictimizar a los niños, crear espacios para la convivencia social y el diálogo, tratar la temática del acoso en la currícula de forma transversal.

 

Sobre lo que hubo consenso

Entre legisladores y expertos hubo consenso. Aquí las conclusiones:

-Sobre las sanciones, hubo consenso acerca de que deben existir. Se trata de una consecuencia sobre los actos que sea utilizada como una acción que haga reflexionar sobre el hecho.

– Más espacios de diálogos: hay que crear espacios y comentar lo que nos pasa como sociedad, destacando temas como la convivencia.

– Sociedad violenta: la mayoría de los ponentes indicaron que muchas veces las actitudes de los jóvenes son un reflejo de lo que se vive como sociedad, mencionando la intolerancia y violencia que está presente en la sociedad argentina actualmente.

– Rol de los padres y políticos: son considerados ejemplos de la sociedad, deben colaborar y, a su vez, bajar los niveles de violencia en discursos y acciones.

– Necesidad de que la sociedad civil se involucre y participe de la implementación de la ley.

– Compromiso por el futuro: legisladores y expertos se comprometieron a una nueva reunión para analizar y evaluar la implementación de la ley.

– Investigaciones: se destacó la importancia de tener estadísticas que profundicen este tema. Analizar las diferencias en el tema del acoso según el género, por ejemplo.

– Consecuencias: tratar de evaluar medidas que puedan ser utilizadas en los casos en que ya se fue víctima del bullying, ¿qué se hace después? ¿Cómo actuar y darle las herramientas necesarias a ese niño/joven?

 

Los tres paneles

En el primer panel se discutió sobre la flamante ley contra el bullying. Asimismo, se mencionaron distintos casos de acoso y se mencionó sobre la polémica incorporación de un 0800 en la ley donde alumnos puedan comunicarse para denunciar un acoso, recibir contención o información sobre el tema; los panelistas mencionaron que, si bien es una medida genérica, lo que busca es dar una respuesta rápida al problema, la finalidad es tratar de encontrar una solución a la gente lo antes posible. Del mismo participaron la diputada nacional Schmidt-Lierman, quien organizó el evento, la diputada nacional del FpV Mara Brawer y Pedro Robledo, coordinador de Diversidad e Inclusión de la Fundación Pensar.

 

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