En el evento, legisladores y personalidades provenientes de diferentes países disertaron sobre los desafíos de la democracia y la libertad en la región.
Para abrir el encuentro, Schmidt–Liermann destacó que “debemos actuar como factor de garantía de la comunidad internacional para fortalecer los valores comunes como la libertad, la democracia y la paz” y reclamó “transparencia en las elecciones de Venezuela”.
Por su parte, el escritor y periodista Carlos Alberto Montaner, quien fue homenajeado durante el acto, se manifestó a favor de este tipo de iniciativas “donde legisladores latinoamericanos apoyan a los cubanos y venezolanos en estos tiempos donde su libertad está en peligro”. Además, resaltó la importancia del internacionalismo democrático.
En este mismo sentido se expresó el presidente del Center for Freedom and Democracy, Marc Wachtenheim, alegando que “se requiere de esfuerzos mancomunados entre las fuerzas políticas y las fuerzas de la sociedad civil”. “Vivir en democracia y libertad implica también una responsabilidad”, aseguró Wachtenheim y continuó señalando que “estamos llamados a ejercer nuestra libertad a favor de aquellos que aún no gozan de ella”.
El panel también contó con la presencia de Osvaldo Alfonso Valdés, Vice-Presidente de la Unión Liberal Cubana y ex-prisionero político y de conciencia del grupo de los 75. Valdés, luego de relatar su trágicos años de persecución y cárcel, explicó que no existen cambios reales en la isla, cuyo régimen continúa siendo totalitario y confiscador de todo derecho y libertad. Por ello, afirmó, resulta tan importante este Grupo, el cual debe mostrar la verdadera cara de la dictadura cubana a todos aquellos que aún creen en posibles aperturas con los Castro.
A su turno, el diputado y jefe de la oposición en Bolivia Adrián Oliva, se mostró convencido de que “los gobiernos de turno están generando en nuestros países un deterioro de las bases de la democracia y están vulnerando y violando los derechos humanos de ciudadanos que hoy son víctimas de los abusos del poder”, para luego manifestar que “nosotros, parlamentarios electos por voluntad popular, tenemos que defender a nuestro continente”. En consecuencia, para unir esfuerzos, se decidió que el naciente Grupo por Cuba formará parte de la Alianza Parlamentaria Democrática de América, a fin de convertirse en un fuerte contrapeso del “internacionalismo revolucionario” y del Foro de Sao Paulo.
Finalmente, todos los oradores declararon la urgente necesidad de una investigación internacional independiente sobre los hechos que rodearon la muerte de Oswaldo Payá y de Harold Cepero, solidarizándose con sus familias; e hicieron un llamado para la pronta liberación del preso político Alan Gross.
Como bien subrayó Schmidt-Liermann “la defensa de la democracia y los derechos humanos constituye un patrimonio de todos y es nuestro deber protegerlos”.
Para comunicarse con el Grupo Parlamentario Latinoamericano por la Democracia en Cuba:prodecuba@gmail.com
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